Tuvo amigos íntimos y detractores profundos, pero todos coincidieron en una verdad indiscutible: fue uno de los mejores escritores del mundo en castellano, si no el más completo y prolífico. Él ha sido, de hecho, el último autor en español en recibir el Nobel, en 2010. La Academia sueca no pudo ser, entonces, más certera en su calificación. Se lo dieron, así rezaba el comunicado oficial, «por su cartografía de las estructuras del poder y sus imágenes de la resistencia, rebelión y derrota del enemigo».. Cuatro ‘esquinas’ (como Flora Tristán y Gauguin en una de sus más famosas novelas, El paraíso en la otra esquina) formaron el universo de Vargas Llosa, en el que vivió y sufrió esa rebelión y derrota de la que habló la Academia en su día: la literatura, el periodismo, el amor y la política.. El periodismo, su primera pasión. Jorge Mario Pedro Vargas Llosa nació en Arequipa, Perú, el 28 de marzo de 1936. Escritor, político y periodista peruano, todo eso y más, estaba en su amplísimo currículum. Ganador de todos los premios existentes en la literatura, pasó su infancia entre Bolivia y Perú y al terminar sus estudios primarios colaboró en los diarios La Crónica y La Industria, donde comenzó a mostrar vivamente su interés por el periodismo. Este fue hasta el final uno de sus oficios más notables y probablemente el que más le conectó con la realidad que cuestionó en sus artículos y colaboraciones.. Siguiendo su trayectoria cronológicamente, en 1952 escribe una obra de teatro titulada La huida del Inca, que se estrena en un teatro de Lima. Esta pieza viene a ser su «bautizo» literario.. Vargas Llosa estudió Letras y Derecho en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y empezó a colaborar ya profesionalmente en periódicos y revistas, como editor de los Cuadernos de Composición y de la revista Literatura.. En 1958 le conceden la beca de estudios Javier Prado en la Universidad Complutense de Madrid, donde obtiene el título de Doctor en Filosofía y Letras. Un año más tarde se traslada a París, y allí trabaja en diferentes medios hasta que entra en la Agencia France Press y, más tarde, en la Radio Televisión Francesa, donde conoce a numerosos escritores hispanoamericanos que marcarán su vida personal de manera continua.. Francia se convertirá así en una de sus cuatro «casas» en el mundo, con Perú, concretamente Lima, Londres y Madrid, escenarios que circularán en su vida y en su obra de manera pendular y oscilante.. En 1965 se integra en la revista cubana Casa de las Américas como miembro de su consejo de redacción y permanece en ella hasta 1971. En esos años actúa varias veces como jurado de los premios que llevan el nombre de la institución.. La política, un asalto frustrado. Posteriormente viaja a Nueva York, invitado al Congreso Mundial del PEN Club, e instala su residencia en Londres, donde trabaja como profesor de Literatura Hispanoamericana en el Queen Mary College.. A finales de los ochenta entra en el mundo de la política en Perú, uno de los asuntos que más le han atraído siempre, aunque no consiguiera sus objetivos y aquella decisión le ocasionara críticas, problemas y muchas decepciones.. Fue en 1989 cuando se presentó a la presidencia de su país, que le arrebató Alberto Fujimori. Hace dos años, Mario Vargas Llosa aseguraba en una entrevista que “la política corrompe profundamente a los seres humanos”, y en otra manifestaba que “la corrección política es enemiga de la libertad”. Aun así, a punto de cumplir 87 años, habló de la posibilidad de reintentar su asalto a la presidencia de Perú, hecho que nunca se produjo.. En 1975 inicia una serie de trabajos cinematográficos (otra de sus alegrías), y en marzo de ese año es elegido Miembro de Número en la Real Academia Peruana de la Lengua. En 1976 es elegido presidente del PEN Club Internacional, cargo que ocupa hasta 1979.. Durante este periodo trabaja además como traductor para la UNESCO en Grecia, junto al argentino Julio Cortázar; hasta 1974, su vida y la de su familia transcurre en Europa: París, Londres y Barcelona.. En Perú presenta el programa televisivo La Torre de Babel y en 1983 preside la Comisión Investigadora del caso Uchuraccay, dedicado a resolver el asesinato de ocho periodistas. A finales de los ochenta, entra en el mundo de la política en Perú y en 1990 regresa a Londres, donde retoma su actividad literaria.. En marzo de 1993 obtiene la nacionalidad española, sin renunciar a la peruana, un acontecimiento que marcaría su vinculación con nuestro país de por vida.. En 1994 es nombrado miembro de la Real Academia Española y ese mismo año gana el Premio Cervantes, el más prestigioso en lengua española, por sus méritos en la creación literaria. Lo prueba el hecho, entre otros, de que su obra ha sido traducida a más de 30 idiomas.. Posteriormente, es reconocido doctor honoris causa en numerosas universidades. El último gran nombramiento de Vargas Llosa fue como académico de la Lengua en París, en 2023, con lo que Vargas Llosa pasó a formar parte, con el sillón 18, de la lista de los «inmortales», nombre con el que se denomina a los miembros de la Academia Francesa, fundada en 1635 por el Cardenal Richelieu.. El amor: de su tía a Isabel Preysler. Vargas Llosa ha tenido en el amor una de sus mayores inspiraciones creadoras. Cuentan las crónicas que su proverbial enemistad con otro Nobel, Gabriel García Márquez, vino por un asunto de mujeres, nunca aclarado del todo. En concreto, se habría insinuado a Mercedes, mujer del colombiano.. El peruano se casó con 19 años con su tía, Julia Urquidi, 10 años mayor que él y divorciada. En realidad no había consanguinidad, ya que Julia era la hermana de Olga, tía política de Mario, mujer de Luis Llosa, hermano de la madre del escritor. De esta unión nació uno de los libros más completos, La tía Julia y el escribidor, un avance de lo que su trayectoria aportaría a la literatura universal.. Los lazos familiares siguieron persiguiendo la vida amorosa de Llosa, quien se casó por segunda vez con su prima Patricia Llosa, con quien tuvo tres hijos: Álvaro (1966), Gonzalo (1967) y Morgana (1974). Aunque parecía una unión indestructible (y con quien ha terminado sus días), al escritor se le «cruzó» una vieja amiga en su camino.. El Nobel se separó de Patricia cuando se enamoró de Isabel Preysler, hace nueve años. No fue amor a primera vista, pero sí una relación apasionada que sacó de su habitual enclaustramiento intelectual al escritor. Y Isabel le devolvió las ganas de amar tras quedarse viuda del exministro Miguel Boyer.. Con la aristócrata española, el escritor vivió una serie de experiencias, viajes, eventos y compromisos sociales a las que no estaba acostumbrado. De ser un intelectual prácticamente consagrado a la escritura y sus satélites, pasó a estar en fiestas, tendidos, cócteles y banquetes de tintes rosas, hasta que en enero de 2023 la pareja anunció inesperadamente su ruptura.. Él, dicen que hastiado de la vida social que había llevado, escribió un cuento en el que se refería a los hijos de ella, en particular a Tamara Falcó, con la que vivió en la mansión de Preysler. Su exnovia dijo que no aceptaría críticas de nadie contra sus hijos. Fin de una aventura que terminó sin que nunca más volvieran a hablarse. De la felicidad al rencor y el olvido definitivos.. Cuando estuvo enfermo, Isabel no escribió ni preguntó nunca por él, según sus hijos, que se volcaron en su cuidado, al igual que Patricia, con la que se reconcilió y quien ha sido su compañera fiel en las venturas y en las desdichas hasta su muerte en Lima.. Autor de un centenar de libros, Vargas Llosa tocó todos los géneros literarios con idéntica maestría y sensibilidad. La novela dio títulos tan indispensables como La ciudad y los perros, La guerra del fin del mundo, Travesías de la niña mala, Pantaleón y las visitadoras… En teatro acumuló también mucho éxito y el ensayo fue uno de sus terrenos predilectos, junto con el trabajo de cronista, que firmó hasta poco antes de su muerte.. De su primer libro (1959), Los jefes, al último, Le dedico mi silencio, un homenaje a la música criolla, Vargas Llosa firmó obras magistrales como Conversación en la catedral, ganó millonarios galardones como el Planeta (1993) con Lituma en los Andes, escribió de otros autores de manera ensayística como Flaubert, García Márquez, Sartre, Camus o Rubén Darío, y navegó en las aguas procelosas de conflictos internacionales como articulista de pedigrí.. Su cambio de orientación política, sus devaneos con el poder y sus opiniones afiladas no fueron siempre entendidas ni aceptadas, pero el personaje que fue nunca eclipsó al escritor que seguirá siendo eternamente: excepcional.
El Nobel de Literatura en 2010 fue una de las voces más brillantes de la narrativa mundial
Tuvo amigos íntimos y detractores profundos, pero todos coincidieron en una verdad indiscutible: fue uno de los mejores escritores del mundo en castellano, si no el más completo y prolífico. Él ha sido, de hecho, el último autor en español en recibir el Nobel, en 2010. La Academia sueca no pudo ser, entonces, más certera en su calificación. Se lo dieron, así rezaba el comunicado oficial, «por su cartografía de las estructuras del poder y sus imágenes de la resistencia, rebelión y derrota del enemigo».. Cuatro ‘esquinas’ (como Flora Tristán y Gauguin en una de sus más famosas novelas, El paraíso en la otra esquina) formaron el universo de Vargas Llosa, en el que vivió y sufrió esa rebelión y derrota de la que habló la Academia en su día: la literatura, el periodismo, el amor y la política.. El periodismo, su primera pasión. Jorge Mario Pedro Vargas Llosa nació en Arequipa, Perú, el 28 de marzo de 1936. Escritor, político y periodista peruano, todo eso y más, estaba en su amplísimo currículum. Ganador de todos los premios existentes en la literatura, pasó su infancia entre Bolivia y Perú y al terminar sus estudios primarios colaboró en los diarios La Crónica y La Industria, donde comenzó a mostrar vivamente su interés por el periodismo. Este fue hasta el final uno de sus oficios más notables y probablemente el que más le conectó con la realidad que cuestionó en sus artículos y colaboraciones.. El rey Gustavo de Suecia entrega el Nobel de Literatura a Mario Vargas Llosa, durante la ceremonia celebrada en Estocolmo, el 10 de diciembre de 2010.GETTY IMAGES. Siguiendo su trayectoria cronológicamente, en 1952 escribe una obra de teatro titulada La huida del Inca, que se estrena en un teatro de Lima. Esta pieza viene a ser su «bautizo» literario.. Vargas Llosa estudió Letras y Derecho en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y empezó a colaborar ya profesionalmente en periódicos y revistas, como editor de los Cuadernos de Composición y de la revista Literatura.. En 1958 le conceden la beca de estudios Javier Prado en la Universidad Complutense de Madrid, donde obtiene el título de Doctor en Filosofía y Letras. Un año más tarde se traslada a París, y allí trabaja en diferentes medios hasta que entra en la Agencia France Press y, más tarde, en la Radio Televisión Francesa, donde conoce a numerosos escritores hispanoamericanos que marcarán su vida personal de manera continua.. Mario Vargas Llosa, en una de sus últimas apariciones públicas junto a su hijo Gonzalo, durante una corrida de toros celebrada en Madrid, el 10 de mayo de 2023.GETTY IMAGES. Francia se convertirá así en una de sus cuatro «casas» en el mundo, con Perú, concretamente Lima, Londres y Madrid, escenarios que circularán en su vida y en su obra de manera pendular y oscilante.. En 1965 se integra en la revista cubana Casa de las Américas como miembro de su consejo de redacción y permanece en ella hasta 1971. En esos años actúa varias veces como jurado de los premios que llevan el nombre de la institución.. La política, un asalto frustrado. Posteriormente viaja a Nueva York, invitado al Congreso Mundial del PEN Club, e instala su residencia en Londres, donde trabaja como profesor de Literatura Hispanoamericana en el Queen Mary College.. Isabel Preysler en la gala del 20º aniversario del Teatro Real junto a Vargas Llosa y Tamara FalcóGetty Images. A finales de los ochenta entra en el mundo de la política en Perú, uno de los asuntos que más le han atraído siempre, aunque no consiguiera sus objetivos y aquella decisión le ocasionara críticas, problemas y muchas decepciones.. Fue en 1989 cuando se presentó a la presidencia de su país, que le arrebató Alberto Fujimori. Hace dos años, Mario Vargas Llosa aseguraba en una entrevista que “la política corrompe profundamente a los seres humanos”, y en otra manifestaba que “la corrección política es enemiga de la libertad”. Aun así, a punto de cumplir 87 años, habló de la posibilidad de reintentar su asalto a la presidencia de Perú, hecho que nunca se produjo.. En 1975 inicia una serie de trabajos cinematográficos (otra de sus alegrías), y en marzo de ese año es elegido Miembro de Número en la Real Academia Peruana de la Lengua. En 1976 es elegido presidente del PEN Club Internacional, cargo que ocupa hasta 1979.. Durante este periodo trabaja además como traductor para la UNESCO en Grecia, junto al argentino Julio Cortázar; hasta 1974, su vida y la de su familia transcurre en Europa: París, Londres y Barcelona.. En Perú presenta el programa televisivo La Torre de Babel y en 1983 preside la Comisión Investigadora del caso Uchuraccay, dedicado a resolver el asesinato de ocho periodistas. A finales de los ochenta, entra en el mundo de la política en Perú y en 1990 regresa a Londres, donde retoma su actividad literaria.. En marzo de 1993 obtiene la nacionalidad española, sin renunciar a la peruana, un acontecimiento que marcaría su vinculación con nuestro país de por vida.. En 1994 es nombrado miembro de la Real Academia Española y ese mismo año gana el Premio Cervantes, el más prestigioso en lengua española, por sus méritos en la creación literaria. Lo prueba el hecho, entre otros, de que su obra ha sido traducida a más de 30 idiomas.. Rocío Jurado y Mario Vargas Llosa en una gala ofrecida al Presidente de Colombia en julio de 2005.ARCHIVO. Posteriormente, es reconocido doctor honoris causa en numerosas universidades. El último gran nombramiento de Vargas Llosa fue como académico de la Lengua en París, en 2023, con lo que Vargas Llosa pasó a formar parte, con el sillón 18, de la lista de los «inmortales», nombre con el que se denomina a los miembros de la Academia Francesa, fundada en 1635 por el Cardenal Richelieu.. El amor: de su tía a Isabel Preysler. Vargas Llosa ha tenido en el amor una de sus mayores inspiraciones creadoras. Cuentan las crónicas que su proverbial enemistad con otro Nobel, Gabriel García Márquez, vino por un asunto de mujeres, nunca aclarado del todo. En concreto, se habría insinuado a Mercedes, mujer del colombiano.. Los escritores Gabriel García Marquez y Mario Vargas Llosa.Los escritores Gabriel García Marquez y Mario Vargas Llosa.. El peruano se casó con 19 años con su tía, Julia Urquidi, 10 años mayor que él y divorciada. En realidad no había consanguinidad, ya que Julia era la hermana de Olga, tía política de Mario, mujer de Luis Llosa, hermano de la madre del escritor. De esta unión nació uno de los libros más completos, La tía Julia y el escribidor, un avance de lo que su trayectoria aportaría a la literatura universal.. Los lazos familiares siguieron persiguiendo la vida amorosa de Llosa, quien se casó por segunda vez con su prima Patricia Llosa, con quien tuvo tres hijos: Álvaro (1966), Gonzalo (1967) y Morgana (1974). Aunque parecía una unión indestructible (y con quien ha terminado sus días), al escritor se le «cruzó» una vieja amiga en su camino.. Mario Vargas Llosa y Patricia Llosa en 2011.Europa Press / GETTY IMAGES. El Nobel se separó de Patricia cuando se enamoró de Isabel Preysler, hace nueve años. No fue amor a primera vista, pero sí una relación apasionada que sacó de su habitual enclaustramiento intelectual al escritor. Y Isabel le devolvió las ganas de amar tras quedarse viuda del exministro Miguel Boyer.. Con la aristócrata española, el escritor vivió una serie de experiencias, viajes, eventos y compromisos sociales a las que no estaba acostumbrado. De ser un intelectual prácticamente consagrado a la escritura y sus satélites, pasó a estar en fiestas, tendidos, cócteles y banquetes de tintes rosas, hasta que en enero de 2023 la pareja anunció inesperadamente su ruptura.. Él, dicen que hastiado de la vida social que había llevado, escribió un cuento en el que se refería a los hijos de ella, en particular a Tamara Falcó, con la que vivió en la mansión de Preysler. Su exnovia dijo que no aceptaría críticas de nadie contra sus hijos. Fin de una aventura que terminó sin que nunca más volvieran a hablarse. De la felicidad al rencor y el olvido definitivos.. Portada de ‘Le dedico mi silencio’ de Mario Vargas Llosa, su última novela publicada.EDITORIAL ALFAGUARA. Cuando estuvo enfermo, Isabel no escribió ni preguntó nunca por él, según sus hijos, que se volcaron en su cuidado, al igual que Patricia, con la que se reconcilió y quien ha sido su compañera fiel en las venturas y en las desdichas hasta su muerte en Lima.. Autor de un centenar de libros, Vargas Llosa tocó todos los géneros literarios con idéntica maestría y sensibilidad. La novela dio títulos tan indispensables como La ciudad y los perros, La guerra del fin del mundo, Travesías de la niña mala, Pantaleón y las visitadoras… En teatro acumuló también mucho éxito y el ensayo fue uno de sus terrenos predilectos, junto con el trabajo de cronista, que firmó hasta poco antes de su muerte.. De su primer libro (1959), Los jefes, al último, Le dedico mi silencio, un homenaje a la música criolla, Vargas Llosa firmó obras magistrales como Conversación en la catedral, ganó millonarios galardones como el Planeta (1993) con Lituma en los Andes, escribió de otros autores de manera ensayística como Flaubert, García Márquez, Sartre, Camus o Rubén Darío, y navegó en las aguas procelosas de conflictos internacionales como articulista de pedigrí.. Su cambio de orientación política, sus devaneos con el poder y sus opiniones afiladas no fueron siempre entendidas ni aceptadas, pero el personaje que fue nunca eclipsó al escritor que seguirá siendo eternamente: excepcional.